Algún día tropezaréis conmigo como quien cae en un barrio que no conoce. Callejuelas, gentes, esquinas... tanto por descubrir, que siempre quedará algo.

Un teatro de cien localidades en pie, aplaudiendo. Somos nosotros quienes interrumpimos la ovación, de larga que es.
Hemos dado un espectáculo que a algunos les va a durar varios días.

Y me digo:
Sí, he formado parte de esto.

Este mediodía he presentado mi libro. Y supongo que este hecho debería ser lo más importante de este mediodía (quizá del día entero), pero sé que no.

Pienso en las almas de Jaume e Isa sonriéndome y me digo:
Sí.
De esto, también.

Un día.
Tan sólo un día.

Dicen que hay que compartir cuando uno se siente privilegiado, porque alegras a quienes te quieren. Incluso, a quienes aún no te han brindado la oportunidad de que les quieras.

Pero no soy capaz de compartir
lo privilegiado que me siento.

17 de Abril, 2016